Prensa Gabinete de Seguridad y Paz
Una
vez más, el gobernador del estado Mérida, Alexis Ramírez, rechazó los focos de
violencia que ha generado la oposición en Venezuela, y muy especialmente en la
entidad andina, con la excusa de exigir elecciones generales al Consejo
Nacional Electoral (CNE), cuando falta más de un año para las elecciones
presidenciales, pues las regionales ya están siendo preparadas por el ente
comicial, sufragio que –aseguró el mandatario regional– ganará la Revolución.
En
ese sentido, el gobernador refirió que la oposición supone que los
revolucionarios no están preparados para medirse en los comicios, pero
“nosotros estamos preparados para ir a elecciones y ganar las batallas, a
encontrarnos nuevamente con la victoria. Estamos absolutamente seguros de eso.
Si las elecciones son en julio, serán en julio, si son en diciembre, nos
contaremos en diciembre; y si son en el 2018, iremos a elecciones en 2018 con
absoluta confianza”.
De
igual manera, el mandatario regional se preguntó: ¿En qué parte de la
Constitución dice que hay que hacer elecciones generales? A lo que respondió:
“No hay por qué hacer elecciones generales. A nosotros nos corresponderá ir a
un proceso electoral de gobernadores y alcaldes y después del 2018, una vez que
se cumpla el período, se harán elecciones presidenciales”.
Líneas de odio
Por
otra parte, Ramírez destacó que los partidos de oposición en Venezuela no
tienen autonomía para ejercer la política en el país. A su juicio, siguen la
línea del Gobierno de Estados Unidos y sus grupos, que financian a las
organizaciones partidistas exigiendo la salida del presidente Nicolás Maduro,
de tal manera que “llenan a la gente de odio, y ese odio llega a las
universidades y hasta a la Iglesia”.
Al
respecto, el gobernador reprobó que este año hayan querido hacer “una Semana
Santa diabólica”, ya que –según él– los discursos en las iglesias no fueron
para orar a Dios, ni por la paz, ni la salud de las personas; por lo contrario,
fueron discursos políticos agresivos, incitando a la gente a salir a la calle a
protestar y a generar violencia.
Llamado de paz a la Iglesia
El
mandatario regional manifestó su vergüenza ante lo que hizo el cardenal Urosa
Savino en la Basílica de Santa Teresa, en Caracas, donde “lanzó un discurso
agresivo, sabiendo que hay gente que comulga con el Gobierno revolucionario.
Hay actos en los que debe reinar el respeto, porque así como hay católicos de
oposición, también los hay chavistas y hay que respetar eso. Yo les exijo
respeto a los cardenales, en especial a Baltazar Porras Cardozo, a quien le
hago un llamado respetuoso para que no sigan llamando a la gente a generar
violencia”.
En
este orden de ideas, el gobernador dijo creer que los cardenales Baltazar
Porras y Urosa Savino están distanciados del papa Francisco, porque el sumo
pontífice está llamando al diálogo en Venezuela, mientras que los cardenales
llaman al derrocamiento, a desconocer al Gobierno revolucionario y salir a las
calles para generar violencia. “Ustedes están ahí para mediar entre Dios y el
pueblo, no para llamar a la violencia”.