Columna: Punto y aparte
Por Alex Vallenilla
El mundo se está partiendo en dos enormes hemisferios. El eje dominado por China y Rusia y el eje occidental. Este último con enormes dificultades. En medio del re-acomodo global, Venezuela y su situación política, económica y social, se tiene que mover al filo de una navaja. Veamos.
Las sanciones de EEUU, se están revirtiendo contra los objetivos de Washington. China y Rusia sellaron un pacto y esto es resultado del movimiento que EEUU viene haciendo en el terreno de bloqueo de finanzas de países. Pero, además, China pudo hacer que Arabia Saudita e Irán, limen sus asperezas. El resultado es una China con un enorme poder comercial en Asia, ahora en Eurasia y en el Medio Oriente, con una alianza energética con los países productores de petróleo del golfo Pérsico y ahora con Rusia.
*Otro grave error de Occidente*
En las últimas semanas, Francia, tuvo que comprar gas natural licuado, vendido por los Emiratos Árabes Unidos, a través de la bolsa de Shanghái. El negocio se cerró en yuanes, no en dólares. Es este el punto clave de todo el conflicto.
Los chinos, que son dueños de la mitad de los bonos de deuda de EEUU, dejaron de comprar esos instrumentos de inversión. Lo que está produciendo una caída de su valor en los mercados de deuda y muchos bancos en Occidente, están sentados en grandes cantidades de estos bonos, con el riesgo de caer en crisis, como ya pasó hace semanas con los primeros.
En cambio, China y Rusia, están aprovechando otro error garrafal de Occidente. El mercado de oro monetario es objeto de manipulación a través de instrumentos derivados de los bancos. Los bancos centrales permiten tal manipulación, para que el precio del oro no suba tanto, de modo que no quede una percepción de que el control de la inflación con monedas fiat, no es del todo eficiente. Un informe de la Oficina del Interventor de la Moneda, de la Secretaría del Tesoro de EEUU, así lo establece.
*Esconder la inflación de Occidente, ayuda a Rusia y a China*
Esta manipulación del precio del oro, hace que, en medio de la actual situación, el oro monetario esté muy barato. Una muestra de ello, es que mientras la inflación de EEUU, está en 6 % en el último año, en los últimos 12 meses, el precio del oro subió 4,54 %. De hecho, con el alza de precios en EEUU, el oro cayó de 1.927 dólares la onza, a 1.618 dólares la onza, entre abril y octubre de 2022 (Gráfica 1). Obviamente, por efecto del alza de tasas de interés. Esta manipulación, para que en Occidente no se hable de alta inflación, la están aprovechando China y Rusia, para comprar enormes cantidades de oro físico, a precios muy bajos y abandonar los bonos de deuda de EEUU.
Ese es uno de los incentivos que China ofrece a los árabes. El comercio entre Arabia Saudita y EEUU, es de 38 mil millones de dólares. Mientras que, entre Arabia Saudita y China, es de 78 mil millones de dólares. Los chinos ofrecieron a los árabes, que los excedentes de yuanes que tengan, producto del comercio de petróleo con esa moneda, los pueden cambiar a oro, en la bolsa de Shanghái. Esto produjo que los países del ASEAN, la semana que pasó, declararan desligarse del comercio con el dólar y otras divisas extranjeras. Es decir, en Asia, comenzó la des dolarización.
*La salida de Washington*
Todo lo que está ocurriendo en aquel hemisferio ya tiene repercusiones en el occidental. El presidente de Brasil, Lula Da silva, ha emprendido acciones internacionales. Declaró Brasil como mediador en el conflicto Ucrania-Rusia y aunque no tenga el peso para serlo, eso tiene otro propósito. Lula acaba de decir que Brasil se mantendrá en equilibrio, seguirá el comercio con China, ahora en yuanes, y el comercio con EEUU, continuará en dólares. Por allí entrarán Venezuela, Colombia y el resto de Latinoamérica. Mientras EEUU, para sostenerse, succionará toda la riqueza de Europa, continente que va rumbo a la “latinoamericanización”.
El reciente sorpresivo recorte de petróleo de la OPEP, tiene sus consecuencias, lo que hará que Washington sea cada más cercano al actual gobierno venezolano, para aumentar el flujo de petróleo y para buscar una estabilización de Venezuela.
*El yuan y el dólar*
El movimiento de China, Rusia y la OPEP, es letal en Asia, pero, en función de que, en el juego del poder, según las circunstancias, hay que dejar una salida al enemigo, EEUU y Occidente, podrán tener sus recursos energéticos en Venezuela y Guyana. Es decir, a Joe Biden, le toca entenderse con Nicolás Maduro y en función de que el mundo se parte en dos, Occidente seguirá con el dólar, Asia y Eurasia con el yuan y Latinoamérica, por sus relaciones con China y por estar en el hemisferio de EEUU, le toca usar las dos monedas. No es casual que el Banco Central de Venezuela, (BVC), desde hace tiempo, presenta sus reservas denominadas en las dos monedas.
En función de lo anterior, se entiende que detrás de los movimientos de Maduro, con la supresión de una de las líneas del chavismo, ahora tenga en la agenda, el tema de Guyana, que de perderse el Esequibo, tendrá que aceptar en silencio, porque así lo estarían acordando Beijing, Moscú y Washington, para no tener que ir a una guerra. El petróleo venezolano y guyanés, son el alivio para EEUU, lo que evitaría un conflicto global catastrófico.
*Nos leemos la próxima semana*
