domingo, 2 de abril de 2023

Mérida, a cada instante, sedienta de agua potable






En la Mérida, capital del municipio Libertador del estado Mérida, región andina venezolana, ciudad que catalogan como “ciudad turística por excelencia”, propios y extraños, sufren por el suministro del preciado líquido, a cada hora del día, tarde, noche, esta urbe andina, llueva o no llueva, carece de un eficiente servicio de agua potable, ya las excusas no valen, ni se las cree nadie.

Mérida es una ciudad, a cada instante, sedienta de agua potable, de manera especial, en el centro de esta urbe que tildan de turística, aunque la deficiencia del preciado líquido, se siente en todos los sectores de la ciudad y cuando llega, el color del codiciado líquido, deja mucho que decir, del trabajo que ejecuta el ente que llaman “Aguas de Mérida” cuyos argumentos al respecto, no se los creen ni ellos mismos.  

En el centro de Mérida, en puertas de la temporada vacacional que implica la Semana Santa, todos los días, los merideños y los que no lo son, visitantes, viajeros, turistas, están sedientos de agua potable; comenta un vecino que vive en pleno casco urbano merideño “ni para lavarnos las manos tenemos agua potable pero el cobro mensual sí es super elevado y sin excusa, se paga o te cortan un servicio que no tiene todos los días”.

La situación se torna intolerante, habida cuenta, que en los días vacacionales que tenemos por delante, la preocupación entre hoteleros, restaurantes, fuentes de soda, posadas, similares, es latente y desesperada,  toda vez, que no saben cómo ofrecer un buen servicio a la corriente turística, cuando no se cuenta con un permanente servicio de agua potable, lo que dificulta la prestación de una atención como debe ser, a quienes nos visitarán por la Semana Mayor, sin olvidar las penurias que se pasan con los bajones de la energía eléctrica, suministro de gas.

Así estamos, vivimos y convivimos en Mérida, “ciudad turística”, todos los días, sedienta de agua potable, entre otros servicios básicos y  lo peor de caso, es que los Aguas de Mérida, revientan en rabia, porque si les critica el pésimo servicio que prestan a la comunidad, un servicio que cobran en tarifa mensual elevada, que no se justifica cancelar, cuando no se cuenta a diario con el preciado líquido (Giovanni Cegarra, GC. CNP. 2229) –

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