lunes, 20 de marzo de 2017

La ULA impulsa paz laboral y académica con recientes acuerdo del CU ante conflicto de vigilancia

 
 
 
Prensa ULA
Los decanos de las diferentes facultades de la Universidad de Los Andes, que permanecen asediadas por parte de pequeños grupos de obreros (Comedor y Vigilancia), encapuchados y motorizados, expusieron la mañana de este lunes 20 de marzo ante el consejo universitario, sus versiones sobre esta realidad que mantiene azotada con tomas violentas, ataques y obstaculización de los accesos.
 El Núcleo de la Hechicera (Facultad de Ciencias, Facultad de Ingeniería, Facultad de Arquitectura y Diseño Industrial) El Núcleo Liria (Facultad de Ciencias Económicas y Sociales, Facultad de Humanidades y Educación, Facultad de Ciencias Jurídicas y Políticas),  y  este lunes sumaron a este asedio a la Facultad de Medicina en la avenida Tulio Febres Cordero y el conjunto Campo de Oro (Facultad de Farmacia y Bioanalisis, Dirección de Transporte, Dirección de Ingeniería y Mantenimiento).
El Consejo Universitario, dada la manipulación mediática sobre el caso de la licitación del comedor y del plan de cambios propuestos para el sector de la vigilancia, abrió los canales de comunicación al debate de estos temas, a los fines de que la comunidad universitaria y merideña en general conozco con detalles sobre estas acciones violentas y sus propulsores.
El caos generado por estos pequeños grupos, implica ataques con morteros hacia el interior de las dependencias, amedrentamientos a estudiantes y trabajadores para el desalojo por vía violenta, encadenamiento de portones, quemas de cauchos y colocación de escombros en las vías y avenidas aledañas. Las consecuencias han sido las continuas suspensiones de actividades académica y administrativas significando esto, la perdida de los programas de estudios, investigaciones y prácticas de laboratorios y el cese de los servicios a usuarios de la universidad.
Tras escuchar las voces que de primera mano han visto los episodios violentos y recopilado las vivencias de trabajadores, estudiantes y de otros obreros afectados, se conoció a través de la comparecencia del Director de Vigilancia.
La comisión especial creada en diciembre pasado por el CU para la observancia de la descentralización y evolución del trabajo de la Dirección de Vigilancia, reconoce la larga lista de incidencias que acontecen a diario sobre el devenir de este servicio tan complejo.
Tras las intervenciones variopintas que develaron situaciones de comportamiento irregular por muy pocos vigilantes y el reconocimiento a una gran mayoría que ha demostrado sentido de pertenencia a la institución, se votaron las propuestas que buscan dar salida al conflicto planteado con carácter correctivo y de administración de la justicia.
En este sentido y por mayoría, los decanos o directores de dependencias deben emitir informe a la Dirección de Vigilancia cuando corroboren faltas, ausencias e inobservancias de las normas por parte de los vigilantes.  Se le reiterará al Gobernador del Estado Mérida, al comandante de la Policía y al Comandante de la Zodi que es deber, como autoridades garantes de la seguridad dar cumplimiento al artículo 7 de la Ley de Universidades. Exigir, mediante oficio redactado por la Consultoría Jurídica de la ULA, y por ante la Fiscal General de la República la actuación de la Fiscalía del Estado Mérida en la infinidad de casos interpuestos sin que hasta la fecha se haya dictaminado alguna respuesta.  Igualmente se le exigirá al ministro del Trabajo la actuación expedita y conformo a la ley de la Inspectoría del Trabajo del Estado Mérida.
El resto de las la propuesta votadas por mayoría tiene que ver con la continuación de los talleres y cursos de actualización para un mejor servicio de los vigilantes. La Dirección de Vigilancia junto a Plandes y el Vicerrectorado Administrativo, han de presentar las características de los cerramientos, construcción de garita y otro cualquier dispositivo necesario en cada una de las dependencias universitarias.
El exhorto al rector y al director de vigilancia de suspender el ingreso de nuevos vigilantes hasta tantos se definan y diseñen los mecanismos de evaluación en términos de competencias, también recibió las manos alzados de la mayoría de los consejeros presentes.  Se aprobó también el derecho de palabra de los supervisores quienes a su vez deberán presentar a la brevedad el proyecto de propuesta que aspiran sea escuchado y valorado por parte de la Comisión de Seguridad. Dicho Coordinador de la comisión deberá notificar al CU los avances de dicha deliberación.
Se mantiene el proceso de cambios gestionado hasta el momento, dado que una suspensión afectaría el plan de resguardo de las dependencias en la venidera temporada vacacional de agosto.
Finalmente se brindó por unanimidad un voto de confianza a la gestión del director de vigilancia, profesor Leonardo Sánchez.

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