Prensa Carlos Ramos
Para el pre candidato a la
gobernación del estado Mérida, Carlos Ramos, la Tarjeta de la Patria es un
sistema de afiliación (engañoso), presentado como una política social y
económica para alcanzar la “soberanía alimentaria, mostrándola como complemento
a la producción del país”; siendo totalmente falso, ya que todos sabemos que en
este momento no existe producción que resuelva la crisis alimentaria que
vivimos los venezolanos.
En un país donde se marca una
extrema diferencia entre el salario y el poder adquisitivo, es ilusorio pensar
que esta sea la solución. Según expertos
económicos, con un salario de 40.638,00 y el índice inflacionario tan elevado,
como se mostró en el cierre del 2016, con una inflación estimada entre el 500%
y 800% y la caída del PIB que fue de 12,5%, y considerando que mensualmente el
incremento de los productos y servicios se ubicó entre el 16,5% y 17,5%, es
irracional que un Carnet con un monto de 50 mil bolívares mensuales, sea vista
como un mecanismo seguro de amarre de programas sociales y financiamiento a las
familias. Aseveró Ramos que es irresponsable e
insuficiente para satisfacer las necesidades de los venezolanos, pues, más que
una solución, es una carga para la economía del país, conducente a seguir estimulando la inflación, el mercado
negro del bachaqueo y el contrabando, entre otros.
Expresó además, que
es una herramienta ineficaz de control económico por las prácticas de este
gobierno, “no debe sorprendernos que sea utilizada como un instrumento de
control político, manipulando el sistema de registro de las personas, captación
de huellas dactilares para identificarlos y utilizarlos a su conveniencia para
seguir manteniendo y concentrando el poder a costa de sofocar los derechos
individuales de los ciudadanos”.